Biofinca Mangomania

Variedades de mangos y mucho más ...

Del color amarillo al morado – Mangas de la Biofinca

¿Por qué mangas, no decimos todos "mangos"? Jeanette Göhner, de Mangomania, nos explica la sutil diferencia. 

El mango es la fruta del árbol tropical que crece de forma salvaje. Los palmeros también lo llaman "macho". Es de tamaño pequeño y la carne es bastante fibrosa. Manga es el nombre del fruto de las plantas injertadas. Tiene una carne más firme, poca o ninguna fibra y también se llama "hembra". El sabor aromático se diferencia desde ligeramente resinoso a dulce o muy dulce, según la variedad.

Cuando Jeanette y su marido Alberto se hicieron cargo de la finca en el sureste de la isla hace más de 13 años,  por casualidad había tres árboles de mango. Estaban en muy mal estado – y fueron la chispa del inicio de la mangomanía. 

Sin embargo, primero tuvieron que eliminar las malas hierbas de dos metros de altura y crear rompevientos. Después llegó el momento de plantar y de aprender. Los dos querían saberlo todo sobre el cultivo de su fruta favorita.

La pareja hispano-alemana se ha hecho experta en poda, injertos, prevención y control de plagas.

Actualmente, en su finca crecen 17 variedades seleccionadas de manga en unos 100 árboles. Los tres árboles originales también agradecen estar bien cuidados y siguen dando frutos. Sólo se recogen las mangas maduras. Jeanette las reconoce no sólo por su color o su firmeza, ella puede sentirlas. Cada día, ella y Alberto van de árbol en árbol y recogen sólo los frutos maduros. Esto lleva más tiempo, pero garantiza una excelente calidad.

La finca ha crecido 

Para los apasionados del manga, la finca es un pasatiempo como compensación a su trabajo en el ordenador.

Lo disfrutan, experimentan con diferentes variedades de mangas en el mismo árbol y también han plantado una gran variedad de árboles exóticos. El clima subtropical de La Palma es ideal para la diversidad de especies vegetales.

El monocultivo y el uso de venenos están descartados para Jeanette y Alberto.

En su finca ecológica, las gallinas escarban y picotean la tierra en busca de pequeños invertebrados; una oveja y los restos de poda triturados proporcionan abono orgánico; en los árboles cuelgan botellas con atrayentes contra la temida mosca de la fruta y sólo se añade azufre contra el moho durante la floración de los árboles en primavera.

Las numerosas y pequeñas flores blancas o rosas desprenden un cierto olor a lirio. Los frutos tardan entre 3 y 6 meses en desarrollarse y madurar. Cuelgan de un largo tallo, que en algunas variedades tiene que soportar casi un kilo. Según la variedad y el grado de madurez, la piel de las mangas se presenta de color verde claro, amarillo, rosa claro, rojo o morado.

La demanda es alta y el rendimiento de la finca familiar es de entre 1000 y 1500 kg.

Aunque la época de cosecha se extiende de septiembre a diciembre aproximadamente, los frutos de la mangomanía sólo están disponibles durante cinco o seis semanas al año en varias tiendas ecológicas o en el mercado de agricultores de San Pedro (Agromercado Breña Alta). Además, pueden pedirse o recogerse por acuerdo telefónico con Jeanette.

Tour y fruta fresca 

No solo durante la temporada de mangos, Mangomania sorprende a los visitantes.

En las visitas guiadas siempre hay árboles exóticos y frutos inusuales que descubrir. Los senderos, bien diseñados, conducen a la papaya, el lichi, la nuez de macadamia, el plátano, el zapote, la granada, la guayaba y el anacardo, entre otros. Una pequeña degustación mima y sorprende los paladares de los participantes. Jeanette tambiénha empezado a hacer mermeladas y salsas caseras, por supuesto con su propia fruta.

Visita guiada en la finca (aprox. 2 h) con pequeña degustación

Viernes por la mañana de 10:30 – 12:30h o bajo petición. Coste 15€ / pers.