Mareando / Casa Amarilla

Abril de 2021 - Lamentablemente, el proyecto "Mareando / Casa Amarilla" ha finalizado su actividad de esta forma.

Espacio Agricola-Socio-Cultural Mareando / Casa Amarilla
649 69 02 90 (Conchi) / 633 86 93 76 (Kesia)

Espacio sociocultural y agrícola

La organización sociocultural Mareando ha hecho revivir los campos sin cultivar durante muchos años de una casa de gran valor cultural e histórico ubicada en Breña Baja.

Siempre en movimiento, como la marea baja y la marea alta — ese es el lema de este grupo tan comprometido.

Lo queramos o no — nada permanece igual...

La asociación se fundó en el año 2007 y ha ido centrando su atención en las actividades agrícolas y socioculturales. 

Casa Amarilla – un bien cultural con interés etnográfico

Los miembros de la asociación encontraron en 2014 un lugar apropiado para llevar a cabo sus ideas: la Casa Amarilla, ubicada en el pueblo de Las Ledas.

El edificio se construyó en 1920, estaba vacío y expuesto al deterioro.

Por razones de salud, sus propietarias ya no podían mantener la propiedad y vivían desde hace tiempo en la isla vecina de Tenerife.

Tal y como nos cuenta Kesiá Castillo Rodríguez, la búsqueda de las propietarias no fue fácil, pero una vez establecida la conexión, ellos y unos amigos emprendieron el camino. 

Expusieron personalmente sus ideas a las mujeres y a la Fundación Canaria Sagrada Familia, bajo cuya supervisión se encontraban las tres hermanas.

La idea de un punto de encuentro para un cambio social con actividades para todas las edades y nacionalidades fue bienvenida. Así se firmó un acuerdo para 7 años de usufructo.

Mareando se ha comprometido a renovar la casa, a cuidarla y a restablecer sus superficies útiles. 

Estos jóvenes tan comprometidos incluso han logrado recuperar derechos de agua que se habían perdido.

Las tierras desaprovechadas cuentan entretanto con una cosecha rica gracias al esfuerzo de los miembros de la asociación.

Entre ellos se encuentra también Conchi Lozano Pérez, pionera de la agricultura ecológica en La Palma y fundadora de la Red de Semillas local. 

Entre los huertos crecen hierbas aromáticas, flores y algunos frutales

La variedad es un componente indispensable de la agricultura ecológica.

Las preciosas flores atraen a abejas, mariposas, escarabajos, pájaros, y todos ellos contribuyen a la prevención de enfermedades y plagas.

Dependiendo de la temporada hay fresas, colinabos, rabanitos, diferentes coles y lechugas, remolachas, puerros, chayotas, cebollas, habichuelas, zanahorias, maíz, ciruelas, pimientos, pepinos, calabazas, berenjenas, diferentes hierbas aromáticas y mucho más.

Kesiá ya anhela el trabajo con los frutales, algunos de los cuales aún se deben limpiar y además también quieren plantar algunos frutales nuevos. El terreno abarca una hectárea y aún ofrece mucho espacio para nuevas actividades.

Éstas incluyen cursos sobre la agricultura ecológica, la construcción de sistemas de aguas de riego y la producción de compost.

Todos son bienvenidos y naturalmente se colabora con otras asociaciones o productores ecológicos. 

La población de los pueblos de la isla se reduce cada vez más.

El fomento de la agricultura ecológica, de la conciencia medioambiental y las aportaciones al desarrollo sostenible en el ámbito agrícola ofrecen a Mareando la posibilidad de llevar a cabo cambios sociales. 

Con la Casa Amarilla desean crear puestos de trabajo en la agricultura ecológica y eso ya ha enriquecido la oferta social y cultural.

Esto se logra de forma continua mediante noches de películas, talleres para adultos y niños, exposiciones, música y una gran biblioteca con libros en varios idiomas.

El intercambio de conocimientos y la comunicación se lleva a cabo en español, inglés y a veces en alemán o simplemente con gestos.

Una vez a la semana se abren las puertas al punto de venta directo de la Casa Amarilla

Ahí le espera a todos los interesados una oferta de frutas y verduras recién cogidas.

Además de los propios productos agrícolas, también se ofrecen otros productos palmeros como vinos, gofio, plátanos, setas de ostra y semillas. 

Únicamente los cosméticos naturales provienen de la isla vecina de La Gomera.

Conchi nos cuenta que al principio acudían principalmente gente alemana que valoraba una dieta saludable. Luego se sumaron las madres palmeras con sus niños pequeños y más tarde las personas que sufrían enfermedades graves o que tenían familiares afectados por enfermedades. Hoy en día, la demanda crece constantemente.

Se nota claramente un cambio en la conciencia en la sociedad.

Quien desee comprobar si la calidad se puede saborear y quien desee contagiarse con la energía positiva de Mareando, puede visitarlos los viernes entre las 11 y las 18 horas.

Si lo desea, Kesiá o Conchi también se tomarán el tiempo para enseñarle por la finca.

Texto: Ines Dietrich / Fotos: Uka Roesch