Taracontilla

"Pequeño Dragón"

"taraguntía" "tacorontilla"


Dracunculus canariensis Kunth


La presencia natural de la taracontilla se limita a las islas con más humedad. Crece en grupos y no huele mal. 

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Se trata de un endemismo canario perteneciente a la familia de las aráceas

Sus hojas largamente pecioladas parten de tallos verdes.

Es una planta persistente que posee raíces tuberosas y que puede crecer hasta una altura de 1 - 1,50m.

La taracontilla llama la atención durante su periodo de floración, aprox. entre mayo y agosto, debido a su estrecha espata de color blanco verdoso.

Ésta puede alcanzar los 50cm de largo y conforma la vaina. En su interior se encuentra la fina espádice. 

A diferencia de otras especies de la familia de las aráceas, no huele mal, sino a miel.

Aunque solo por un corto periodo de tiempo, después de que se abran las diminutas flores amarillas que nacen directamente sobre la espádice.

El fruto se compone de muchas bayas que a medida que maduran pasan de color verde a amarillo y a rojo.

El poco común "pequeño dragón" (la traducción de Dracunculus) crece en grupos, pero solo en unos pocos lugares. La planta necesita un suelo rico en humus y un lugar sombreado o semisombreado.

Se puede encontrar entre 200 - 1.600m sobre el nivel del mar en laderas montañosas, en zonas de matorrales o como sotobosque en bosques mixtos.

Durante la seca estación de verano, el Dracunculus retrae sus hojas y descansa. No soporta la escarcha.

En La Palma podemos encontrar la taracontilla, por ejemplo, en la laurisilva de Los Tilos y en la zona de Breña Baja - Mazo (en un tramo de la ruta de senderismo GR 130).

Texto & Fotos: Ines Dietrich

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